Acciones contra el machismo.

Como docentes, es crucial crear un ambiente seguro y respetuoso para todos los estudiantes. Cuando somos testigos de conductas machistas que pueden afectar emocionalmente a nuestros estudiantes, especialmente a las estudiantes, es esencial actuar de inmediato para garantizar su bienestar y promover la igualdad de género. Por ende, si fuera testigo de una situación así se debe la conducta en el momento en que ocurra. Esto envía un mensaje claro de que el comportamiento machista no será tolerado. Además, ofrecería un espacio seguro para que la estudiante afectada pueda expresar sus sentimientos y preocupaciones conmigo en un espacio privado de total seguridad, confianza y empatía. En ese espacio, la informaría sobre los recursos disponibles en la Universidad, como consejería y apoyo psicológico, para ayudarla a lidiar con cualquier impacto emocional. Con el consentimiento de la estudiante, daría inicio al protocolo de la institución educativa para reportar el incidente.

En cuanto a las actitudes similares que se pueden presentar en un ambiente universitario, generalmente, las mujeres somos interrumpidas más frecuentemente en clases y reuniones, lo que desvaloriza nuestros aportes y afecta nuestra confianza. También, se espera que las mujeres asumamos roles de cuidado y organización, como tomar notas, preparar material o coordinar eventos, mientras que a los hombres se les asignan tareas de liderazgo. Incluso, la violencia machista se puede presentar en forma de chistes o comentarios aparentemente inofensivos que perpetúan estereotipos de género, sugiriendo que las mujeres somos menos competentes en áreas como la ciencia, la tecnología o la ingeniería, estos realizados tanto por estudiantes como por profesores.

Los anteriores son ejemplos de micromachismos, es decir comportamientos sutiles y cotidianos que perpetúan la desigualdad de género y el sexismo y que pueden pasar desapercibidos, pero tienen un impacto significativo en la experiencia de las mujeres.

Por ello, todos, todas y todes somos agentes de cambio, en nuestras aulas y en espacios comunes, debemos expresarnos en contra de estas actitudes por más pequeñas que parezcan.