[Jaime Roberto Muñoz Luque]

Me parece que la exigencia no implica acoso, un profeso exigente pregunta a todos de manera equilibrada y si le pregunta más a una estudiante o a un estudiante para ayudarlo no lo va a presionar hasta el punto de que se sienta acosado o ansioso. El hecho de que siempre pase a una misma persona es incómodo pues hay más alumnos en la clase.

No he podido dejar de acceder o disfrutar de un ligar, pero si he sido víctima de los estereotipos, pues siempre me ha gustado la ciencia y el estudio, por lo cual nunca fui muy popular entre mis compañeros de colegio y ya de adulto muchas veces fui rechazado por las mujeres por ese tema. Palabras como Nerd o Ñoño fueron ofensivas para mí, aunque con el tiempo aprendí a verlas con un sentido positivo y no necesariamente negativo, dependiendo de la forma, actitud y la persona que las decía.

Si claro muchos años atrás tuve un compañero con el que de entrada no quería formar grupo porque por su apariencia me parecía que podia ser vago. Sin embargo, los grupos se formaron y me toco como compañero de grupo, lo cual me preocupó mucho, no lo discriminé ni lo traté diferente, pero en mi interior sentía cierta angustia hasta que con el pasar de un par de semanas me di cuenta que era muy responsable y trabajaba muy bien, mejor que los demás compañeros.

[Autor]

Entradas