Acercarme a esa persona y escucharle sin juzgar. Ver si quiere tomar alguna acción relacionada con el trato que recibió y ponerse a su disposición por si necesita apoyo o ayuda.
Fijarme en mis conductas con otras personas y los discursos que informan mi acción. A menos de haber sido puestos en duda, lo más probable es que perpetúen diferentes tipos de violencia y sostengan un sistema social opresivo no solo con las personas percibidas como distintas, sino con nosotros mismos.